Uno nunca sabe cuándo puede aparecer un agente de cambio. Muchas veces asociamos el cambio con acciones monetarias debido a su impacto tangible e inmediato. El cambio a menudo es el resultado de un acto aparentemente intangible cuyo efecto tarda años en verse —a veces jamás se ve— por la persona responsable por dicho cambio.
Me baso en mi propia experiencia.
Fui un alumno promedio en la secundaria, y el primer año y medio en la universidad se me hizo difícil. No se debió a una falta de esfuerzo, sino que mi niñez en un pequeño pueblo no me preparó lo suficiente para tal experiencia. Me preguntaba si saldría adelante, ¿cómo sería mi futuro?
Durante el último semestre de mi segundo año de universidad, tomé una clase cuyo instructor tenía fama de ser bastante estricto. (Esta fue la improbable situación que cambiaría el rumbo de mi trayectoria universitaria y, subsiguientemente, el de mi vida).
Había tomado el primer examen y no me esperaba resultados mejores de los que había tenido en otras clases. Ansioso, esperé a que el instructor me entregara mi examen, y cuando llegó el momento, vi las dos palabras que transformarían mi trayectoria universitaria y luego mi vida: “buen trabajo”. El impacto de esas dos palabras fue inimaginable. Me ayudaron a creer que yo era capaz de lograrlo, y me comunicaron que había alguien que me estimaba.
He tenido la fortuna de visitar a mis apadrinados en las Filipinas. Durante cada visita, pasé tiempo hablando acerca de mis experiencias y de tener fe en sus habilidades para lograr lo que se propongan. Muchas veces me repiten mis palabras al escribirme una carta y cuando los visito. Me recuerda que las palabras son importantes. Jamás dudan el impacto de ellas. Las palabras inspiran; dan fe, motivación y esperanza a los jóvenes que buscan una vida mejor.
Cada uno de nosotros como padrinos y madrinas —y como miembros del Equipo de CI— tiene el poder de ser un agente de cambio. Nosotros tenemos un papel y contribuimos parte de un todo. Les damos a los jóvenes apadrinados la oportunidad de mejorar sus vidas, las de sus familias y las personas a su alrededor, reflejado en el logotipo de Children International.
Nunca duda que la semilla que siembra está dando fruto. Se revelará de diferentes maneras, y quizás usted tenga la fortuna de experimentarlo personalmente. A veces solamente se requiere de algunas palabras para hacer un cambio que dura toda una vida.
A todas las personas que participan activamente en este gran esfuerzo potenciador, ¡buen trabajo!
Chris Kent ha sido padrino de Children International durante muchos años y apadrina 20 niños.
Comentarios
mjohn110
oct 29, 2016
Great! And their, the sponsored kids words resonate with me and float my boat to keep me sailing along.
GinaBKellogg
nov 7, 2016
Chris is such an amazing guy! What an inspiration!
bcooper
dic 9, 2016
Great article and wonderful reminder that we make a difference every day with those we know and see and those we don't know and see! The effects of encouragement and love impact so many and last a lifetime! Thank you for the article.
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